EL ÁNFORA DE LAS METÁFORAS
CINE
"El cine no es un arte que filma la vida, el cine está entre el arte y la vida"
Jean-Luc Godard
"Ningún arte traspasa nuestra consciencia de la misma manera que lo hace el cine, tocando directamente nuestras emociones, profundizando en los oscuros habitáculos de nuestras almas"
Ingmar Bergman
"Yo no sueño en la noche, yo sueño todos los días. Yo sueño para vivir"
Steven Spielberg
Voy a hablar de Woody Allen y de dos de las películas que para mi son las más poéticas de su filmografía (que no significa que sean las mejores).
Por un lado tenemos Todos dicen "i love you", un musical que desde su sencillez al representar esas escenas en las que se canta y baila al ritmo del jazz, logra trasmitir de forma efectiva y se pone la música al servicio de la narración haciendo que la película avance como ya he dicho al ritmo de la música. Posee esa perfecta mezcla entre un drama romántico y una comedia realmente delirante, con personajes variopintos que se cruzan en una misma historia, todos ellos unidos por historias de amor de todo tipo. De sobra son reconocidos esos chispeantes diálogos del genio Woody Allen. Hay escenas realmente graciosas y hay otros tan originales como puede ser ese baile fantasmal en el entierro o la increíble escena en que se presenta una coreografía de altos vuelos, literalmente, los protagonistas parecen levitar en una escena que es auténticamente poética y sugerente, una joya para los sentidos.
Después tenemos la sorprendente película Midnight in París, una historia que nos hará viajar por las calles de un París lleno de nostalgia, en esas enigmáticas calles conoceremos a grandes poetas y artistas de añoradas épocas pasadas. Con aires de fabula Allen nos muestra un retrato enriquecedor sobre la vida, una vida que saliendo de la monotonía logra aportar instantes inolvidables, igual de inolvidables que esa historia de amor que surge de forma tan fantasiosa y que trata de mostrar el ensueño del artista por alcanzar esos ideales tan deseados.
LA LA LAND
La La Land es un autentico espectáculo para los sentidos, y no solo eso, sino que además los sacia en su ansia de deseo. Esta sobresaliente pelicula pertenece al director Damien Chazelle, que ya sorprendió con la electrizante Whiplash.
La La Land es un musical que posee toda esa grandiosidad de los tiempos en los que en Hollywood se hacían películas realmente llenas de fuerza, de personajes con alma e historias que nos hacen soñar.
Se nos presenta en un primer momento como lo que parece ser la típica historia de amor en la que todo parece salir bien, el mundo es perfecto y maravilloso, y uno siente que realmente esto se va a convertir en un pastelón cargado de un artificioso optimismo e ingenua felicidad, pero no, también hay dificultades y pasando una vez tras otra esa línea entre fantasía y realidad nos muestra una historia llena de música y sobre todo de verdad. La película se sustenta con gran solidez gracias a un guion y unos personajes (geniales Ryan Gosling y Emma Stone) que representan una historia idílica pero sin artificiosidades. Mención aparte merecen las canciones al ritmo de jazz, realmente es un conjunto con alma, de las que solo se ven de vez en cuando. Y no solo eso sino que tiene un mensaje, mensaje dirigido a aquellos soñadores que se atreven a perseguir sus metas, pero sin buscar la evasión de la realidad sino luchando por ellos en un mundo de obstáculos.
De todas maneras de nada sirve tratar de encontrar palabras para describir este espectáculo de altos vuelos, es toda una experiencia y un verdadero placer para los sentidos, para todos los que se atreven a soñar por muy tontos que parezcan.
PATERSON
Paterson, conductor de autobús y poeta, nos muestra un camino por su rutina cotidiana durante una semana. A simple vista esta rutina se vuelve monótona, pero a través de los ojos de Paterson no. Él se percata de aquellos detalles que para otros pasan desapercibidos. Es la visión de un poeta cotidiano que observa las cosas sin grandilocuencias, ni pedantería, simplemente disfruta de cada instante que hace de ese día uno completamente diferente al anterior.
Y también lo que supone un gozo enorme, el protagonista se encuentra con otros artistas como él, momentos fugaces compartidos con otras personas -la niña poetisa, el rapero de la lavandería, el ocasional visitante japonés admirador de la poesía de William Carlos Williams, admirado por el protagonista.
Esta discreta historia supone una expresiva declaración de que todos podemos ser artistas, basta con mirar el mundo, descubrir su belleza y contarlo. Tan sencillo -y tan difícil- como eso.
DRIVE
Un tipo lacónico y solitario, cuyo nombre jamás sabremos. Experto conductor de automóviles, compagina trabajar en un taller y ser especialista de películas en Los Ángeles. Pero además, por las noches, realiza única y exclusivamente el papel de chófer en golpes criminales, con increíble frialdad y habilidad fuera de toda duda. Una vida en la que no hay lugar para el sentimiento, hasta que un suceso le agitará de tal manera que le hará despertar de la oscuridad en la que se encontraba, haciéndole vislumbrar la fugaz luz de la esperanza.
El enigmático protagonista que se ve atrapado en un sentimiento que le hace plantearse la posibilidad de redención y a que precio deberá pagarla. Misterioso relato de alguien del que jamás sabremos el nombre.